«Dios dijo: “Hágase la luz”; y hubo luz.» – Génesis 1:3 (NVI)
En Edify, creemos que la educación es más que lo académico: es discipulado, formando corazones y mentes para vivir Coram Deo, “ante el rostro de Dios”. Esta frase latina nos recuerda que cada parte de la vida se vive en Su presencia, bajo Su autoridad y para Su gloria.
Una vida de integridad
Vivir Coram Deo es vivir con integridad y propósito, rechazando una fe fragmentada limitada a los domingos. Ya sea un maestro que guía una lección, un director de escuela que lidera con sabiduría, un estudiante que descubre su potencial o un socio financiero que da generosamente, cada acción tiene un significado espiritual. Así como Jesús fue fiel tanto en la carpintería como en el ministerio, estamos llamados a honrar a Dios en todo lo que hacemos.
La educación como obra del reino
La transformación comienza cuando el aprendizaje se alinea con una cosmovisión bíblica. Cuando los estudiantes estudian a través de la lente de las Escrituras, se preparan no solo para carreras, sino también para vidas de servicio y liderazgo semejante al de Cristo. La educación centrada en Cristo cultiva la sabiduría, la integridad y un compromiso con la justicia que se extiende más allá del aula.
Restaurando Shalom a través del aprendizaje
La humanidad fue creada para el shalom: un estado de integridad con Dios, con los demás y con la creación. Hoy en día, la educación puede ayudar a restaurar esa armonía equipando a los estudiantes con sabiduría, justicia y amor. El objetivo va más allá del logro personal para dar forma a las comunidades para la gloria de Dios.
Edify acompaña a las escuelas para hacer realidad nuestra visión de Naciones Piadosas Florecientes, desarrollando estudiantes que viven Coram Deo, buscan la verdad y reflejan el Reino de Cristo en todo lo que hacen. Obtenga más información en edify.org.
